

OpenAI revirtió discretamente un cambio importante en la forma en que cientos de millones de personas usan ChatGPT. En una entrada de blog de bajo perfil, donde la empresa da seguimiento a sus actualizaciones de producto, informó la eliminación del enrutador de modelos de ChatGPT para los usuarios de los planes Gratuito y Go, este último con un costo de 5 dólares al mes.
Este sistema automático enviaba las consultas más complejas a modelos de “razonamiento” más avanzados. A partir de ahora, esos usuarios pasarán a utilizar GPT-5.2 Instant, la versión más rápida y económica de la nueva familia de modelos de OpenAI. El acceso a los modelos de razonamiento se mantiene, aunque ya no de forma automática: los usuarios deberán seleccionarlos manualmente.
El enrutador se lanzó hace apenas cuatro meses, como parte del esfuerzo de OpenAI por unificar la experiencia de usuario con la llegada de GPT-5. La función analizaba cada pregunta antes de decidir si ChatGPT debía responder con un modelo rápido y de bajo costo o con uno más lento, costoso, pero capaz de razonar con mayor profundidad. La idea era dirigir a los usuarios hacia los modelos más avanzados justo cuando los necesitaban. Antes de esto, el acceso a esos sistemas dependía de un “selector de modelos”, una función que, según el CEO Sam Altman, la compañía odiaba “tanto como cualquier usuario”.
En la práctica, el enrutador terminó enviando a muchos más usuarios gratuitos a los modelos de razonamiento avanzado, cuya operación resulta significativamente más cara. Poco después de su lanzamiento, Altman aseguró que el uso de estos modelos entre usuarios gratuitos pasó de menos del 1% al 7%. Aunque la apuesta buscaba mejorar la calidad de las respuestas de ChatGPT, el sistema no tuvo la aceptación que OpenAI esperaba.
Problemas con el enrutador
Una fuente familiarizada con el tema declaró a WIRED que el enrutador afectó negativamente la métrica de usuarios activos diarios de la compañía. Si bien los modelos de razonamiento representan la frontera del rendimiento en IA, pueden tardar varios minutos en resolver preguntas complejas y requieren un costo computacional mucho mayor. Para la mayoría de los usuarios, la espera no es útil, incluso si la respuesta es mejor.
Según Chris Clark, director de operaciones del proveedor de inferencia de IA OpenRouter, los modelos de respuesta rápida siguen dominando en los chatbots de consumo masivo. En este tipo de plataformas, la velocidad y el tono pesan más que la profundidad del razonamiento. “Si alguien escribe algo y luego tiene que esperar 20 segundos mientras aparecen los pasos del pensamiento, no es muy atractivo. En los chatbots de IA compites directamente con Google Search. El negocio de Google siempre ha sido la rapidez; nunca pensaron: ‘Deberíamos dar respuestas mejores aunque eso las haga más lentas'”, explica.
Un portavoz de OpenAI dijo a WIRED que, basándose en los comentarios de los usuarios, la empresa concluyó que quienes usan los planes Gratuito y Go prefieren mantenerse en la experiencia de chat predeterminada, con la opción de activar manualmente el razonamiento cuando lo necesiten. OpenAI no especificó qué señales concretas influyeron en esta decisión. También señaló que sus modelos instantáneos ahora pueden tomarse más tiempo para responder, acercándose en ciertos casos al comportamiento de los modelos de razonamiento y reduciendo así la brecha para la mayoría de los usuarios.
Aun así, los usuarios de pago de ChatGPT siguen valorando el sistema de enrutamiento, y la compañía espera que la tecnología continúe evolucionando. Según fuentes cercanas al tema, OpenAI probablemente relanzará el enrutador de modelos para los planes Gratuito y Go una vez que haya sido mejorado.
Rivalidad acalorada
El cambio se produce en un momento en que OpenAI busca reforzar ChatGPT frente a una competencia cada vez más intensa, especialmente por parte de Google. El mes pasado, Altman declaró una “alerta roja” en toda la empresa para concentrar recursos en la mejora de su principal producto de consumo. Aunque ChatGPT sigue siendo un gigante en el sector de la IA, con más de 800 millones de usuarios activos semanales, la directora financiera de OpenAI, Sarah Friar, informó a los inversionistas que el tiempo que los usuarios pasan en la plataforma ha disminuido ligeramente tras las recientes restricciones de contenido.
Desde agosto, OpenAI ha implementado varias medidas de seguridad en ChatGPT, entre ellas sugerir pausas durante conversaciones excesivamente largas y ampliar el alcance de sus clasificadores para bloquear más contenido considerado inseguro.