Uncategorized

La nueva biblia cripto de Trump es todo lo que la industria siempre soñó

La Casa Blanca ha presentado su plan para marcar el comienzo de una “nueva edad de oro estadounidense”, con la criptomoneda en el centro.

En un informe de 160 páginas publicado el miércoles, los representantes de la Casa Blanca esbozaron una serie de recomendaciones a los funcionarios del gobierno federal sobre la creación de un marco jurídico y un conjunto de normas reguladoras para las empresas que manejan criptoactivos en Estados Unidos.

Tus deseos cumplidos

Si los legisladores y los reguladores las ponen en práctica, las recomendaciones regalarían a la industria de las criptomonedas, que gastó cientos de millones de dólares influyendo en las elecciones al Congreso de 2024, prácticamente todo lo que había estado pidiendo durante la administración Biden.

Entre otras cosas, la Casa Blanca recomienda que el Congreso promulgue leyes que resuelvan el prolongado debate sobre la clasificación de los criptoactivos y adopten el concepto de finanzas descentralizadas; que los organismos de control financiero utilicen entretanto puertos seguros y espacios aislados de regulación para “permitir que los productos financieros innovadores lleguen a los consumidores sin retrasos burocráticos”; y que los reguladores permitan a los bancos negociar con criptoactivos e impidan nuevas supuestas discriminaciones contra las empresas de criptoactivos.

“Los activos digitales y las tecnologías blockchain pueden revolucionar no solo el sistema financiero de Estados Unidos, sino los sistemas de propiedad y gobernanza en toda la economía”, reza el informe. “Los empresarios estadounidenses que son pioneros en nuevas industrias que utilizan estas tecnologías merecen tanto claridad sobre las políticas que afectan sus esfuerzos como elogios por el progreso que han logrado.”

El informe, descrito como una “biblia regulatoria” por el líder de la Cámara Digital, un organismo comercial de criptomonedas, fue compilado por el grupo de trabajo establecido por el presidente Donald Trump poco después de regresar a la Casa Blanca en enero. Entre sus miembros se encuentran el zar de las criptomonedas y la IA de la Casa Blanca, David Sacks, cuya empresa de capital de riesgo ha invertido en múltiples startups de criptomonedas, y el secretario de Comercio, Howard Lutnick, que hasta su llegada al cargo dirigía la entidad financiera Cantor Fitzgerald, que presta servicios al mayor proveedor de stablecoin del mundo, Tether.

Muchas de las recomendaciones del grupo de trabajo ya se están poniendo en práctica. A mediados de julio, la Cámara de Representantes aprobó la Ley CLARITY, una ley que establecería una taxonomía para los criptoactivos y dividiría la jurisdicción reguladora entre la Comisión de Bolsa y Valores y la Comisión de Comercio de Futuros de Materias Primas. La misma semana, Trump firmó un proyecto de ley separado, centrado en stablecoin.



¿Una nueva era para las criptomonedas?

“Hace unos años, los criptomineros no eran muy buenos en el juego de los grupos de presión”, nos recuerda Charley Cooper, director de operaciones de la firma de criptomonedas Ava Labs y ex director de operaciones de la CFTC. Pero en Trump, dice, “la industria de las criptomonedas vio un aliado”. Aunque se convirtió tarde al cripto, una vez que llegó, la puerta estaba abierta.”

El informe del grupo de trabajo refleja directamente las afirmaciones predominantes en el ámbito de las criptomonedas, según las cuales la administración Biden intentó aplastar la industria mediante una campaña de “regulación por aplicación”. Incluso utiliza términos, como la Operación Chokepoint 2.0, acuñados por la industria para describir la discriminación que supuestamente sufrió.