
En 2015, el abogado mexicano Ulrich Richter Morales y su esposa, la también abogada Claudia Ramírez Tavera, presentaron una demanda civil contra Google Inc. y Google México por difamación. La acusación se debió a un blog en la plataforma Blogger, propiedad de Google, cuyo creador anónimo los vinculaba con delitos graves. En un inicio, Richter indicó que el contenido era falso y solicitó que fuese retirado, pero la empresa se negó. Fue el inicio de un caso que le podría costar a la big tech más de 5,000 millones de pesos (cerca de 262 millones de dólares).
En marzo de 2021, la jueza Judith Cova Castillo, del Juzgado Décimo de lo Civil de la Ciudad de México, dictó sentencia a favor de Richter, concluyendo que existió daño moral, y condenó a Google Inc. a pagar una indemnización. Google México y su entonces director ejecutivo, Lino Cataruzzi, quedaron absueltos.
Google apeló y presentó su defensa argumentando que no era autor del contenido, sino un intermediario, apelando al derecho a la libertad de expresión de sus creadores de contenido. Sin embargo, en junio de 2022, la Octava Sala de lo Civil de la Ciudad de México ratificó el fallo original, pero impuso una multa todavía mayor, de alrededor de 5,000 millones de pesos, como compensación por daño moral.
Google anunció que acudiría a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), alegando exceso de la sanción, además de sentar un precedente con consecuencias graves para la libertad de expresión en internet. El caso está pendiente de resolución ante la última instancia del Poder Judicial mexicano.
El 9 de junio de 2025, la empresa con sede en Cupertino, California, compartió el siguiente comunicado en su blog, el cual replicamos de forma íntegra (las negritas son del texto original):
En Google estamos comprometidos con los principios de libertad de expresión y el importante papel que desempeñan las plataformas digitales para dar voz a todos. Creemos que una internet libre y abierta es esencial para el acceso a la información y el discurso democrático. Desde esta convicción fundamental, abordamos los desafíos relacionados con el contenido de terceros alojado en nuestras plataformas. Un caso presentado en 2014 por el abogado Ulrich Richter Morales en México, ha generado gran interés, y queremos compartir nuestra perspectiva.
El caso se originó a partir de un blog publicado por un usuario plenamente identificado en Blogger, una plataforma propiedad de Google LLC. El Sr. Richter alegó que este blog contenía información difamatoria y calumniosa que perjudicaba su reputación profesional y moral. Es importante entender que Google no genera ni edita el contenido que los usuarios publican en plataformas como Blogger. Nuestro papel es el de intermediario, ofreciendo el servicio que permite a las personas expresarse libremente en línea.
En este caso, la Sentencia de la Juez Décimo Civil en la Ciudad de México declaró a Google Inc. (hoy Google LLC) responsable de daño moral por tolerar y permitir que el blog se continuara difundiendo en su plataforma y la condenó al pago de una indemnización por daños cuyo cálculo carece de fundamentos y claridad, y que, mediante sentencia de apelación de la Octava Sala Civil de la Ciudad de México, se incrementó a más de 5,000 millones de pesos mexicanos (cerca de 260 millones de dólares), cantidad sin precedente alguno por daño moral. Por eso, hemos declarado públicamente que consideramos ambas resoluciones arbitrarias, excesivas, desproporcionadas e infundadas.