
Nvidia ha revelado su hoja de ruta para mantener el liderazgo en el negocio de hardware para inteligencia artificial (IA). La firma anunció las fechas de lanzamiento de sus chips y arquitecturas Blackwell Ultra, Vera Rubin y Rubin Ultra, los cuales ofrecen mejoras significativas en rendimiento.
Durante su conferencia anual de desarrolladores, GTC 2025, la empresa confirmó que las unidades de procesamiento gráfico (GPU), Blackwell Ultra GB300, estarán disponibles en el segundo semestre de 2025. Este chip representa una evolución del Blackwell original, con 20 petaflops (PF) de rendimiento en IA, pero con un aumento significativo en su capacidad de memoria de alto rendimiento y ancho de banda, pasando de 192 a 288 gigabytes (GB).
Esto indica que el nuevo chip de Nvidia está diseñado para procesar y generar más tokens por segundo que su predecesor, lo que le permite ofrecer servicios de soporte de IA para aplicaciones sensibles al tiempo y generar hasta 50 veces más ingresos en comparación con la generación de GPU Hopper, que debutó en 2023.
Los Blackwell Ultra estarán disponibles en un clúster denominado DGX GB300 ‘Superpod’, que mantiene la configuración de 288 CPUs y 576 GPUs, pero ahora ofrece la posibilidad de acceder a una memoria ampliada de 240 a 300 terabytes (TB), con 11.5 exaflops de computación FP4 (cuatro bits de precisión de punto flotante por operación). Este incremento optimiza su capacidad para entrenar y ejecutar modelos de IA con mayor eficacia. Los nuevos chips también estarán disponibles en una versión denominada B300, que solo incluye una GPU; en una variante con ocho GPU en un único servidor blade, y en una configuración para un rack con 72 microprocesadores.
La plataforma Blackwell Ultra, según Nvidia, es ideal para aplicaciones que incluyen agentes de IA con razonamiento sofisticado y planificación iterativa para resolver problemas complejos de múltiples pasos, así como para modelos de IA física. Esto permitirá a las empresas generar videos sintéticos y fotorrealistas en tiempo real para el entrenamiento de aplicaciones en robótica y vehículos autónomos a gran escala.
“El mercado es cada vez más exigente con la IA, ya que las nuevas tecnologías y herramientas, como los agentes de IA, requieren cada vez más capacidad de procesamiento, y Blackwell Ultra es la respuesta de Nvidia a esta demanda”, afirmó Marcio Aguiar, director de la división Enterprise de Nvidia para Latinoamérica. “Queremos que la IA siga transformando el mundo, alcanzando nuevas cotas de innovación y avance”.
Nvidia quiere seguir dominando la IA
Nvidia pretende ir más allá con la arquitectura Vera Rubin, que estará disponible durante el segundo trimestre de 2026 y ofrecerá 50 petaflops de inferencia FP4, más del doble que el Blackwell Ultra. La empresa asegura que un rack completo de esta plataforma debería ofrecer más de tres veces el rendimiento de un Blackwell Ultra comparable.
Finalmente, la compañía adelantó el lanzamiento de Rubin Ultra durante los últimos seis meses de 2027. Esta arquitectura estará formada por dos GPU Rubin interconectadas, lo que le permitirá brindar una capacidad de 100 petaflops FP4 y una memoria de 1 TB.
Nvidia ha generado ingresos por 11,000 millones de dólares con la arquitectura Blackwell. Solo sus cuatro principales compradores han adquirido 1.1 millones de chips en lo que va de 2025, según la corporación.
Jensen Huang, fundador y CEO de Nvidia, enfatizó que la industria necesitará “100 veces más potencia de lo que creíamos necesitar el año pasado” para atender el crecimiento de la IA. Adelantó que la próxima arquitectura de la compañía, tras Vera Rubin, se llamará Feynman, en honor al físico teórico Richard Feynman, y llegará en 2028.
Algunos análisis financieros indican que Nvidia obtiene actualmente cerca de 2,300 dólares en ganancias por segundo gracias a la revolución de la IA. Aunque tras su lanzamiento en enero, el modelo chino DeepSeek R1 generó inquietud entre los inversores de la firma, la compañía vislumbra grandes oportunidades alrededor de esta tecnología. Nvidia planea utilizar el software para evaluar el rendimiento de sus nuevos productos.
A pesar de las preocupaciones iniciales sobre la competencia, Huang considera que DeepSeek es una señal positiva, ya que su enfoque en el ‘razonamiento’ requiere mayor potencia de procesamiento, lo que beneficia a los nuevos chips Blackwell Ultra