

La startup de IA Anthropic, acordó pagar al menos 1,500 millones de dólares para resolver una demanda interpuesta por un grupo de autores de libros que alegan infracción de derechos de autor, lo que supone unos 3,000 dólares por obra. Los demandantes subrayan que las condiciones del acuerdo con “victorias decisivas” y que ir a juicio habría supuesto un riesgo “enorme”.
Se trata del primer acuerdo de demanda colectiva centrado en la IA y los derechos de autor en Estados Unidos, y el resultado puede determinar la forma en que los reguladores y las industrias creativas aborden el debate jurídico sobre la IA generativa y la propiedad intelectual. Según el acuerdo de conciliación, la demanda colectiva se aplicará a unas 500,000 obras, pero esa cifra puede aumentar una vez que se finalice la lista de materiales pirateados. Por cada obra adicional, la empresa de inteligencia artificial pagará 3,000 dólares más. Los demandantes tienen previsto entregar al tribunal una lista definitiva de obras en octubre.
“Este acuerdo histórico supera con creces cualquier otra recuperación de derechos de autor conocida. Es el primero de este tipo en la era de la IA. Proporcionará una compensación significativa para cada obra colectiva y sienta un precedente que exige a las empresas de inteligencia artificial que paguen a los propietarios de los derechos de autor”, comenta el abogado de los demandantes Justin Nelson de Susman Godfrey LLP. Añade que el acuerdo envía un mensaje contundente a las big tech de IA y a los creadores de que recopilar obras protegidas de estos sitios web piratas está mal.
Anthropic no admite ninguna infracción ni responsabilidad
“El acuerdo de hoy, si se aprueba, resolverá las reclamaciones pendientes de los demandantes. Seguimos comprometidos con el desarrollo de sistemas de IA seguros que ayuden a las personas y a las organizaciones a ampliar sus capacidades, avanzar en los descubrimientos científicos y resolver problemas complejos”, declaró en un comunicado Aparna Sridhar, consejera general adjunta de Anthropic.
La demanda, presentada originalmente en 2024 ante el Tribunal de Distrito de EE UU para el Distrito Norte de California, formaba parte de una oleada más amplia de litigios por derechos de autor interpuestos contra empresas tecnológicas por los datos que utilizaban para entrenar programas de inteligencia artificial. Los autores Andrea Bartz, Kirk Wallace Johnson y Charles Graeber alegaron que Anthropic entrenó sus grandes modelos de lenguaje (LLM) con sus obras sin permiso, violando así la ley de derechos de autor.
El pasado mes de junio, el juez de distrito William Alsup dictaminó que el entrenamiento de inteligencia artificial de Anthropic estaba amparado por la doctrina del “uso justo”, que permite el uso no autorizado de obras protegidas por derechos de autor en determinadas condiciones. Fue una victoria para la empresa tecnológica, aunque con sus limitantes. Anthropic se basó en una compilación de libros pirateados de las llamadas shadow libraries (bibliotecas fantasma), incluido el famoso sitio LibGen, y Alsup determinó que los autores deberían poder llevar a Anthropic a juicio en una demanda colectiva por piratear sus obras. La compañía mantiene que en realidad no formó sus productos con las obras pirateadas, sino que optó por comprar copias de los libros.
“Anthropic descargó más de siete millones de copias piratas de libros, no pagó nada y conservó estas copias piratas en su biblioteca incluso después de decidir que no las utilizaría para entrenar su IA. Los autores sostienen que Anthropic debió pagar por esas copias piratas. Esta orden está de acuerdo”, escribió Alsup en su sentencia sumaria.