
Las autoridades chinas han instado a las empresas locales a evitar el uso de procesadores H20 de Nvidia, alegando preocupaciones de seguridad, según un informe de Bloomberg. La supuesta solicitud se da a conocer poco después de que Donald Trump, presidente de Estados Unidos, otorgara una prórroga de 90 días para retrasar la entrada en vigor de nuevos aranceles a China.
El reporte indica que, en días recientes, diversas compañías estatales y privadas recibieron notificaciones que desaconsejaban emplear los chips H20, especialmente en tareas vinculadas con asuntos gubernamentales o de seguridad nacional. La recomendación también se extendería a los aceleradores de inteligencia artificial (IA) de la firma estadounidense Advanced Micro Devices (AMD).
La información coincide con una serie de publicaciones emitidas por organismos y medios estatales chinos que han cuestionado la fiabilidad y seguridad de los microprocesadores de Nvidia. Durante el fin de semana, la cuenta en redes sociales Yuyan Tantian, vinculada a la emisora estatal CCTV, sugirió que China podría dejar de adquirir chips de Nvidia debido a que estos componentes podrían contener “puertas traseras” que comprometerían su funcionamiento y seguridad. “Cuando un tipo de chip no es ecológico, ni avanzado, ni seguro, como consumidores, ciertamente tenemos la opción de no comprarlo”, señaló la publicación.
Estas inquietudes sobre los productos de Nvidia no son nuevas y se intensificaron tras una serie de medidas emitidas por las autoridades estadounidenses para impedir que la tecnología desarrollada en su territorio sea utilizada por países como China para reforzar sus capacidades militares y afianzar su posición en el ámbito de la IA.
El chip H20 de Nvidia fue lanzado el año pasado como parte de una estrategia para mantener su presencia en el mercado chino, después de que la administración de Joe Biden impusiera controles para frenar la exportación de chips avanzados al país asiático. El diseño, funciones y rendimiento del componente fueron modificados para cumplir con la normativa estadounidense.
El mes pasado, la Casa Blanca modificó dichos controles y Nvidia anunció que reanudaría la venta de los H20 en China. Esta semana, Trump confirmó que su gobierno alcanzó un acuerdo con la compañía para facilitar la reactivación de las exportaciones: el fabricante entregará a la administración federal el 15% de los ingresos generados por la venta de semiconductores en China a cambio de las licencias de exportación. AMD habría alcanzado un convenio similar.
Tras los ajustes en las políticas, Washington recomendó establecer controles adicionales para rastrear la ubicación de estos microprocesadores, con el fin de evitar que puedan ser utilizados para fines que considere perjudiciales para sus intereses.
La medida incrementó las preocupaciones de Pekín sobre la seguridad de los chips de Nvidia. A finales de julio, la Administración del Ciberespacio de China advirtió que “expertos estadounidenses en inteligencia artificial revelaron que los chips informáticos de Nvidia cuentan con tecnologías avanzadas de rastreo, localización y apagado remoto”. Citó a la empresa para que explicara los supuestos “riesgos de seguridad de puerta trasera” asociados a los H20 vendidos en China y exigió documentación de respaldo.